Curso Online

Curso de Manipulación de Alimentos

Calidad, Inocuidad y Actualidad

8 principios sobre la inocuidad microbiana


La Inocuidad Microbiana cubre todos los aspectos de seguridad de los productos, incluyendo la ecología de patógenos, de gestión agro, antes de la cosecha y las intervenciones posteriores a la cosecha, y los impactos económicos negativos de los brotes.
Al conocer los principios básicos que aseguran la inocuidad alimentaria a un nivel microbiológico en el contexto de la producción, recolección, empaque y transporte de frutas y hortalizas frescas, los usuarios estarán mejor capacitados para detectar y hacer frente a los principales factores que ponen en riesgo dicha inocuidad.
1. Es preferible prevenir la contaminación microbiológica de frutas y hortalizas que fiarse de las acciones para combatir dicha contaminación.
2. Para reducir al mínimo riesgo microbiológico en frutas y hortalizas frescas, los agricultores, empacadores y transportistas deben usar buenas prácticas agrícolas (GAPs) y de manufactura (GMPs) en las áreas donde puedan ejercer cierto control.
3.  Las frutas y hortalizas frescas pueden entrar en contacto con contaminantes microbiológicos en cualquier punto de su trayectoria desde el campo hasta a la mesa.
4.  Cuando el agua entra en contacto con las frutas y hortalizas frescas, la calidad y procedencia de la misma determina la posibilidad de contaminación por esta fuente, por lo que hay que reducir lo más posible el riesgo de contaminación por el agua.
5. La práctica de utiliza estiércol desechos biológicos municipales sólidos debe ser supervisada con cuidado para reducir al mínimo la posibilidad de contaminación microbiológica de frutas y hortalizas.
6. La higiene y prácticas sanitarias de los trabajadores durante la producción, recolección, selección, empaque y transporte juegan un papel esencial en reducir lo más posible el riesgo de contaminación microbiológica de frutas y hortalizas frescas.
7. Hay que cumplir con todos los reglamentos de los gobiernos locales, estatales y federales, sobre practicas agrícolas.
8. Para que el programa de inocuidad alimentaria de buenos resultados es importante que exista una actuación responsable en todos los niveles del contexto agrícola (en el campo, las instalaciones de empaque, el centro de distribución y el transporte).
Una vez que se establecen buenas prácticas agrícolas (GAPs) es importante asegurarse de que el proceso está funcionando correctamente.

Crédito y Agradecimientos: http://www.revistaialimentos.com.co/

Curso de Manipulación de Alimentos

Calidad, Inocuidad y Actualidad

¿Son Seguros los Colorantes para Alimentos? Mitos y Realidades

Mucho se ha especulado acerca de la inocuidad de los colorantes para alimentos. Algunas fuentes han publicado que estos aditivos son nocivos para la salud y que producen enfermedades como cáncer o déficit de atención en los niños; sin embargo, los fundamentos de estas afirmaciones no son científicamente correctos.

Desafortunadamente, la historia de los colorantes para alimentos es bastante oscura, en el pasado se empleaba cualquier tipo de sustancia coloreada para darle una buena apariencia física a los alimentos, incluso para ocultar estados de descomposición.

Surge entonces una pregunta: ¿qué tan seguros son los colorantes para alimentos? Linda Katz, M.D., M.P.H., Directora de la Oficina de Cosméticos y Colores del Centro para la Seguridad Alimentaria y Nutrición Aplicada, CFSAN, de la FDA, responde: “Los aditivos colorantes son muy seguros cuando se usan apropiadamente”.

El Estudio Southampton: consecuencias

Con el paso de los años, los problemas de hiperactividad y déficit de atención en niños, “clientes” vitales de la industria de confitería y chocolatería, han ido en aumento. Los investigadores argumentan que estos problemas pueden estar originados en uno de dos grupos: trastornos genéticos o inconvenientes de tipo cultural (como el consumo de sustancias específicas).

En 2007 fue publicado en la revista médica The Lancet del Reino Unido, un estudio realizado en la Universidad de Southampton por un grupo de investigadores (McCann et al); en éste se analizó el efecto de ciertas mezclas de colorantes y un conservante en dos grupos de niños: 3 años y 8-9 años de edad. Los colorantes involucrados fueron: Tartrazina, Amarillo Quinoleína, Amarillo Sunset, Ponceau 4R, Rojo 40, Carmoisina y el conservante Benzoato de sodio.

El estudio concluyó que la exposición a mezclas de estos colorantes más el conservante tenía como consecuencia el incremento en la hiperactividad de los dos grupos de niños. Las reacciones no se hicieron esperar y comenzó una campaña mediática en contra de los colorantes sintéticos. Algunas organizaciones solicitaron a diversos organismos regulatorios su prohibición inmediata.

Fue en este punto cuando la Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (EFSA) fue requerida para dar un concepto científico acerca del estudio de McCann et al. Finalizada la revisión, el panel de expertos de la EFSA concluyó que el estudio carecía de bases científicas y que no podía ser usado para prohibir los colorantes en cuestión. Un concepto similar dio la FDA al ratificar la inocuidad de los colorantes.

La presión continuó y el Parlamento Europeo adoptó medidas y mediante la Regulación 1333/2008 modificó el etiquetado de los alimentos que contenían estos colorantes incluyendo la leyenda: “Puede tener un efecto adverso en la actividad y atención de los niños”.

Alergias

Otro de los puntos por el cual los colorantes permanecen en el ojo del huracán es por las alergias que se les atribuyen. Se tiene el falso paradigma de que la gran mayoría de colorantes producen alergias. La FDA argumenta: “Es posible, pero raro, tener una reacción de tipo alérgico a un aditivo de color”. Los únicos dos colorantes a los cuales se les ha comprobado algún tipo de reacción alérgica son el Amarillo 5 o Tartrazina y el Carmín.

Tendencias de consumo

Debido a casos como el de Southampton y a que los consumidores cada vez quieren observar etiquetas más limpias, las tendencias globales de consumo de colorantes siguen estando enfocadas al uso de colorantes naturales.

Latinoamérica no es la excepción y muchas compañías han realizado de forma exitosa el reemplazo de colorantes sintéticos por naturales, tendencia que va en aumento. Si bien es cierto los costos y la estabilidad siguen siendo factores importantes a superar, la dinámica de innovación marcha a pasos acelerados para asegurar reemplazos óptimos tanto técnica como económicamente.

¿Cómo estar tranquilo?

Actualmente, los consumidores pueden estar tranquilos sobre el uso de colorantes en los alimentos, tanto sintéticos como naturales. Las regulaciones existentes cada vez son más estrictas y siempre y cuando se garantice el cumplimiento de los criterios de pureza de los colorantes y sean usados bajo las condiciones establecidas por los entes regulatorios, no existirá ningún inconveniente con su consumo.

Por último, el trabajo conjunto con el proveedor de colorantes toma un papel fundamental. Son muchos los factores a tener en cuenta al momento de desarrollar un tono específico: procurar que el proveedor cumpla con todos los estándares de calidad e inocuidad requeridos tanto para los colorantes como para el proceso de producción y/o extracción; verificar su experticia, cumplimiento de regulaciones y procesos de mejora continua. De esta forma tendrá herramientas adicionales para continuar con el uso apropiado de los colorantes con toda tranquilidad.


Agradecimientos:

Articulo publicado en la revista alimentos (incluyendo la imagen) link: http://www.revistaialimentos.com.co/

Curso de Manipulación de Alimentos Armenia

Calidad, Inocuidad y Actualidad
"Foof Safety... brinda consejos para preparar las comidas de manera más segura...
Una nueva investigación brinda consejos para preparar las comidas de manera más segura"

19 de feb. de 2015
Publicado en Food Safety .gov; Por: Amelia Kermis, MPH CHES, Personal de Educación en Seguridad Alimentaria, Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria, USDA


Durante un estudio reciente de la Universidad Estatal de Kansas (KSU) se observó a un grupo de 120 padres mientras estos cocinaban en una cocina de prueba. Luego de que los participantes terminaran de cocinar, se tomaron muestras con el propósito de encontrar rastros de bacterias no tóxicas en la cocina de prueba y en la comida preparada.

Los investigadores encontraron rastros de bacterias en el 90% de las muestras obtenidas de las ensaladas de frutas preparadas durante el estudio. El 82% de los participantes contaminaron con bacterias el fregadero, el refrigerador, el horno y/o los tiradores del compartimiento para la basura. Los participantes que recibieron material educativo sobre seguridad alimentaria desarrollado por el USDA antes de participar obtuvieron resultados con niveles inferiores de contaminación cruzada que los que obtuvo el grupo de control.

El paño de cocina fue la fuente principal de contaminación cruzada. Los paños de cocina fueron contaminados porque los participantes del estudio los usaron para secar sus manos, las cuales no habían sido lavadas de forma apropiada. Estos fueron usados para secarse o limpiarse las manos varias veces, permitiendo que las bacterias se propagaran.

Usted puede protegerse del riesgo de una intoxicación alimentaria, tal como se halló en este estudio, aplicando estos cambios fáciles de implementar.
Sepa cuándo lavarse las manos

Es fácil olvidar que debe lavarse las manos durante el proceso de preparación de su comida. Esto incluye el momento de empezar a cocinar, luego de manipular carnes crudas, empaques de carnes crudas o huevos crudos y luego de desechar la basura. Más de la mitad de los participantes del estudio no lavó sus manos luego de desechar empaques de carne usados mientras cocina, o bien simplemente se las enjuagó después de desechar otros elementos.
Lávese las manos correctamente

Enjuagarse las manos ligeramente no es suficiente para deshacerse de las bacterias. Aunque puede ser tentador simplemente dejar correr un poco de agua sobre sus manos para eliminar los restos visibles de comida, de esta forma no se está librando de las bacterias más peligrosas. Para librarse de las bacterias se necesita agua y jabón, al igual que la fricción que provoca frotar ambas manos enjabonadas. No se logra solo con un poco de agua.

Para evitar que las bacterias se propaguen en su cocina, asegúrese de lavarse las manos con jabón y agua tibia durante 20 segundos. Una forma fácil de asegurarse de que se esté lavando las manos durante el tiempo suficiente es cantar la canción de "Feliz cumpleaños" dos veces.
www.infoalimentacion.com

Higienice bien sus paños de cocina

Un lavado de manos efectivo no es la única forma de proteger su cocina de la contaminación cruzada. También puede higienizar bien sus paños de cocina. Los paños de cocina deben lavarse de forma frecuente en el ciclo de lavado con agua caliente de su lavarropas. Esto eliminará las bacterias que se han alojado en ellos.
Use las toallas de papel una sola vez

Las toallas de papel deben usarse una sola vez y luego desecharse. Se observaron muchos participantes del estudio que utilizaban toallas de papel como si estuviesen diseñadas para varios usos. Algunos de ellos usaron la misma toalla de papel más de una vez para secar o limpiar sus manos y/o las superficies de la cocina. Esto provoca que las bacterias se propaguen hacia otras superficies.